Un usuario de Twitter ha llamado mi atención al compartir la evolución del logo de Jeb Bush, candidato republicano a las primarias para presentarse a presidente de los Estados Unidos.
Al hilo de esa información,me veo tentado a realizar una reflexión sobre si debemos o no cambiar nuestra imagen y marca a largo plazo. Me parece interesante lo que ha planteado en términos de ahorro, con fina ironía: es evidente que ha gastado poco en diseño. Y podemos estar seguros que no es por falta de recursos.
También hay muchas marcas comerciales como Nike o Google que mantienen o han mantenido durante muchos años una marca que les costó muy barata en origen.
Pero me parece más interesante que la estrategia de Jeb! pase por vincularse a una imagen consistente lo largo de muchos años.
Es evidente que trata de recordar lo bueno a lo que llegó con esas candidaturas y los éxitos conseguidos en su gestión después de ganar elecciones, precisamente con ese logo y esa imagen personal.
Además, el mote familiar que emplea y que es absolutamente reconocido, tiene o pretende un aspecto cariñoso, de cercanía, que sin duda es uno de los objetivos que busca uno de los miembros de la familia Bush. Le ayuda a diferenciarse de los otros Bush que primaron el apellido.
“Vote algo que usted ya conoce y que le ha ido bien”, parece decir. Al mismo tiempo evita el término y apellido Bush que se vincula también a cosas negativas que muchos recuerdos, o sencillamente precisamente porque es tan obvia su pertenencia esa familia trata de reforzar lo que le hace a él distinto de sus predecesores. Su progenitor, y su hermano ambos “Presidente Bush”.
También podríamos argumentar que esto resulta aburrido a largo plazo al ojo o al espectador, pero sin duda lo que sí logra es un reconocimiento rápido. Al final un ahorro de esfuerzos. Hemos hablado ya en Elocuent de otros casos de consistencia a muy largo plazo en la imagen o la forma de vestir: Steve Jobs: un hombre y su marca (de ropa)
Si hablamos de un candidato que trata de huir de un pasado anterior, tendría todo el sentido cambiar constantemente. Sin embargo parece que el menor de los Bush intenta precisamente recordar ese pasado.
Al final en marca, y marca personal, todo depende. Es un equilibrio entre quién eres, lo que tienes y lo que deseas transmitir.
Y Jeb!, siendo un Bush, creo que lo tiene muy, muy claro .
Ahora te toca a ti :
Comparte: No olvides compartir este contenido en tus redes sociales para que otros puedan beneficiarse.
Comenta: Aprovecha para dejarnos tus reacciones en el espacio situado más abajo.
Comunica: Si te interesa formarte o necesitas ayuda con tu comunicación personal en Elocuent podemos ayudarte. Ponte en contacto con nosotros por teléfono: +34 916 307 552 , email:info@elocuent.com o en nuestras redes sociales.
También puedes darte de alta en nuestra newsletter para seguir recibiendo contenido gratuito:
Esperamos que te haya gustado " Consistencia o aburrimiento: el caso Jeb Bush ".
Ahora te toca a ti :
Comparte: No olvides compartir este contenido en tus redes sociales para que otros puedan beneficiarse.
Comunica: Si te interesa formarte o necesitas ayuda con tu comunicación personal en Elocuent podemos ayudarte. Ponte en contacto con nosotros por email:info@elocuent.com o en nuestras redes sociales.